30 de abril de 2010

Los lieder de Robert Schumann

La Editorial Hiperión, por medio de su director, Jesús Munárriz, me ha comunicado que va a publicar mi libro “Los lieder de Robert Schumann”. Si todo va bien es posible que aparezca en el otoño. No cabe duda que esto es un buen homenaje con motivo del bicentenario del nacimiento de Schumann.

29 de abril de 2010

Schubert: Rarezas, fragmentos y versiones alternativas

El sello Naxos ha lanzado el volumen 35 de la edición de los lieder de Schubert. Tal como se adivina por el título del disco encontramos en ella algunas novedades interesantes para completar el opus liederístico de Schubert.
En el tercer volumen de mi libro Los lieder de Schubert, en el apéndice titulado LIEDER QUE NO SE HAN INCLUIDO, figuran tres que sí lo están en el disco de Naxos:
D.81. "Auf den Sieg der Deutscher" (En la victoria de los alemanes) para voz con acompañamiento de de dos violines y violonchelo.
D.83. "Zur Namensfeier Herrn Andreas Siller" (Para el cumpleaños del señor Andreas Siller) para voz con acompañamiento de violín y arpa.
D.555. "Lied". Fragmento sin texto y en el que la línea vocal está confiada al violonchelo, al igual que en el lied D.1A. "Gesang in C" (Canción en do) que en el catálogo Deutsch aparece también sin texto. En la integral de Hyperion, Graham Johnson le ha añadido el texto del lied D.39. "Lebenstraume" (Sueño de vida), como postularon los musicólogos John Reed y Reinhard van Hoorickx, y que yo mismo he incluido en mi libro.

6 de abril de 2010

Hace 500 años


Nació en Sevilla el dramaturgo y actor Lope de Rueda, considerado el precursor del teatro del Siglo de Oro. Son célebres sus pasos y entremeses.
Antonio de Cabezón nacía en Castrillo de Matajudíos (Burgos). Fue uno de los músicos universales de su época, pues al estar al frente de la capilla real, viajó mucho por Italia, Alemania y los Países Bajos, por lo que hubo un conocimiento mayor e influencia mutua entre la música española y la de los otros países. Gran maestro del contrapunto y del teclado, entre sus obras encontramos tientos, variaciones, diferencias..., así como obras vocales. Su hijo Hernando publicó las Obras para tecla, arpa y vihuela de Antonio de Cabezón (Madrid, 1578).
Alonso Mudarra también nació en 1510, aunque no se sabe el lugar. Uno de los grandes vihuelistas españoles del siglo XVI junto con Fuenllana, Pisador, Daza, Luys de Milán y Valderrábano. Es autor de Tres libros de música en cifra para vihuela. El tercero de ellos contiene música para ser cantada y tañida y tiene motetes, villancicos, canciones en romance e italiano, de poetas españoles, latinos e italianos. De todas sus obras me encanta su Fantasía que contrahaze el arpa en la manera de Ludovico.
Andrea Gabrieli se supone que nació en Venecia, donde llegó a ser organista de San Marcos. Es el primer músico de renombre de la llamada Escuela Veneciana. Fue además un gran profesor, entre cuyos alumnos se encontraba su sobrino el célebre Giovanni Gabrieli, quien publicó las obras de su tío a la muerte de éste: libros de madrigales, obras corales e instrumentales.
Clemens non Papa nació en la isla de Walcheren. Este músico flamenco fue uno de los más sobresalientes de su época. Su nombre era Jacques (o Jacobus) Clément y se puso ese apodo para distinguirse de su conciudadano el poeta Jacobus Papa (no tiene nada que ver el papa Clemente VII). Entre su producción encontramos misas, motetes y canciones.
Muere en Venecia el pintor Giorgio Barbarelli da Castelfranco, más conocido como Giorgione, cuyo maravilloso y enigmático lienzo La Tempestad, es uno de mis favoritos. Obligada visita para admirarlo en el Museo de la Academia de Venecia.
En Florencia falleció el 17 de mayo de 1510 uno de los artistas más representativos del Quattrocento italiano, el pintor florentino Alessandro di Mariano di Vanni Filipepi, conocido como Sandro Botticelli. El nacimiento de Venus y La primavera son, tal vez, sus cuadros más conocidos.
El 28 de febrero de 1510 es abatido en combate por los indígenas en Colombia, Juan de la Cosa, navegante y cartógrafo español que participó en los dos primeros viajes de Colón. Dibujó su famoso mapa en el que aparece por vez primera el continente americano.
En el mapa político encontramos que en España, tras la muerte de Felipe I el Hermoso y tras declararse la locura de la reina Juana, Fernando el Católico ocupa la regencia de Castilla. En la campaña africana los españoles toman Bugía y Trípoli, pero con la derrota de Gelves se da por concluida la campaña.
En Alemania reina el emperador Maximiliano I; en Francia, Luis XII, conocido como el padre del pueblo; en Inglaterra, Enrique VIII; en Rusia, el zar Basilio III, padre del futuro Iván Iv el Terrible, prosigue la expansión moscovita. Piero Soderini preside la república de Florencia, cargo que ocupa tras la destitución del monje dominico Girolamo Savonarola, y al frente del Imperio turco está Bayaceto II, el Santo quien conquistó Croacia. Finalmente, en el trono pontificio está Julio II, llamado el “Papa guerrero” y también un gran mecenas de las artes, pues ordenó construir la Basílica de San Pedro y encargó a Miguel Ángel pintar la Capilla Sixtina. Martín Lutero viajó a Roma y la tradición quiere explicar en este hecho el origen de su postura reformista.

3 de abril de 2010

Tango vos, el mi pandero

Fidelidad y calidad de las traducciones son dos conceptos utilizados frecuentemente, en mi opinión, muy a la ligera. La traducción es casi siempre un ejercicio de elección de las palabras adecuadas (?) moviéndose entre una literalidad absoluta por mor de una estricta fidelidad y una excesiva libertad por aquello del “vuelo poético”. Hay además un “prejuicio” que es como un IVA literario: el nombre o los méritos del traductor; si es un autor afamado, la “calidad” se le supone. Voy a proponer una pequeña muestra, sin más pretensión de que sea un pequeño divertimento. El poeta del siglo XVI, Álvaro Fernández de Almeida, escribió el siguiente poema:

Tango vos, el mi pandero,
tango vos y pienso en ál.

Si tú, pandero, supieses
mi dolor y le sintieses,
el sonido que hicieses
seria llorar mi mal.

Cuando taño este instrumento
es con fuerza de tormento,
por quitar del pensamiento
la memoria de este mal.

En mi corazon, señores,
son continos los dolores,
los cantares son clamores:
tango vos y pienso en ál.


Dos grandes escritores alemanes, Emanuel Geibel y Paul Heyse (éste ultimo fue galardonado en 1910 con el premio Nobel), vieron publicado en 1852 su Spanisches Liederbuch (Cancionero español), una antología de 112 poemas españoles traducidos al alemán por ambos. Emanuel Geibel tradujo el poema de Fernández de Almeida y es el texto que utilizó Hugo Wolf para componer un lied que formaba parte de su Spanisches Liederbuch. El texto de Geibel es el siguiente:

Klinge, klinge, mein Pandero,
Doch an andres denkt mein Herz.

Wenn du, muntres Ding, verständes
Meine Qual und sie empfändest,
Jeder Ton, den du entsendest,
Würde klagen meinen Schmerz.

Bei des Tanzes Drehn und Neigen
Schlag’ ich wild den Takt zum Reigen,
Daß nur die Gedanken schweigen,
Die mich mahnen an den Schmerz.

Ach, ihr Herrn, dann will im Schwingen
Oftmals mir die Brust zerspringen,
Und zum Angstschrei wird mein Singen,
Denn an andres denkt mein Herz.


Otro gran escritor alemán, Joseph von Eichendorff, tradujo también poemas españoles y en su libro de poesías publicadas en 1841, aparecen trece poemas españoles dentro de la sección Aus dem Spanischen. El segundo de ellos es el de Fernández de Almeida y es el que utilizó Robert Schumann para componer el coro femenino a cuatro voces Tamburinschlägerin, op. 69, nº 1. El texto de Eichendorff es el siguiente:

Schwirrend Tamburin, dich schwing ich,
Doch mein Herz ist weit von hier.

Tamburin, ach könntst du's wissen,
Wie mein Herz von Schmerz zerrissen,
Deine Klänge würden müssen
Weinen um mein Leid mit mir.

Weil das Herz mir will zerspringen,
Laß ich hell die Schellen klingen,
Die Gedanken zu versingen
Aus des Herzens Grunde mir.

Schöne Herren, tief im Herzen
Fühl ich immer neu die Schmerzen,
Wie ein Angstruf ist mein Scherzen,
Denn mein Herz ist weit von hier.